Ni en los
fondos de tu vientre,
Ni en el gato
que lame tus pies
Ni en los
salmos de la iglesia
Katie King
está en tu
cara
Ninguna otra
cicatriz le es más preciosa
que ese gesto
de niña que se
abre
para albergar
a los fantasmas
Como una cama vacía en la que de golpe
se ha sacado un pie
Así el terror
de ir hacia los seres de los que otros regresan
Late Kati King
en el corazón
de Florence
y es
inagotable
la baba
el trance
la mesa
erguida
el piso que
tiembla
Y ahora?
Quién come de
tu corazón?
y quién bebe?
Es ella
el dolor de espalda, la ropa estrecha
la marca de alucinación y de incerteza
Es ella
Quién vela por ti con la añoranza que no existas
Oh Florence cook
Río calmo al que se arrojó una piedra
Anciana empujada de golpe por un viento extraño
Retorcida en la pared
como una araña ciega
Dentro de tu escote
otra mujer galopa
Enciende la luz, mira
mira
mira
Es katie king
se desvanece como la niebla
No va a quedarse
Se ha ido
la nada es probablemente
la forma definitiva
de El sueño de Sara Singer