No pude cumplirte Carlos, aún escribo
la vida se tuerce como el cogote de un cisne
y yo sigo con mi frasquito bajo el sangrado
Si fuese arquitecta o costurera
hubiese trazado el mismo blanco
el pozo de mi padre
por el que no he dejado de caer
Podría ser
dueña de un video club, vendedora de Gigot,
en las hojas de cálculo yacerían entablillados
fragmentos de la propia extracción
el saldo infeliz de un cálculo brillante
De cualquier forma, escribiría
compensaría a mi madre por ciertas palabras crueles
luciría este concepto penoso del amor,
y el olfato finísimo de animal
que abandonado muy lejos
de lo único que entiende
sabe orientarse
puede volver
Me gustó mucho, Saluditos desde Villa María
ResponderEliminaray... "la vida se tuerce como el cogote de un cisne"
ResponderEliminar(Maldita sea!)
Un abrazo!
El cisne se tuerce como la vida lo hace con las palabras
ResponderEliminarse invierte el troquel de las promesas inconclusas
y de a poco se pierde la libertad, Carlos, lo sabrás
pides cosas que no se pueden cumplir
porque soy los tendones de la mano
que asfixia su propio cogote
y callamos en un idioma extranjero
y vaciamos el frasco de nostalgias
y llenamos el frasco de colores
y somos un frasco invertido
vertido, convertido en un papel, Carlos,
y estoy en esto volviendo mi padre y a mi madre
sé el camino a casa
sigo los silbidos de la memoria
soy un animal no domesticado
soy el sueño de una mujer
soy el frasco
soy el cisne y los colores
soy el texto mudo
y no cumplo con vos.
ufff comento por comentar
ResponderEliminarporque solo me sale un ufff